Si te gustan los espacios diáfanos y con poca ornamentación, pero con mucha luz y en líneas limpias y sencillas, ¡este post es para ti! Hoy hablamos del minimalismo de interiores.
Debido a la situación actual a causa de la crisis climática es y será necesario que reduzcamos nuestro consumo excesivo y que apostemos por un estilo de vida más simple y consciente. Este hecho, no solo se debe aplicar en algunos ámbitos de la vida como por ejemplo en la moda, sino que debemos trasladarlo a todo nuestro contexto. Una tendencia en alza en el diseño de interiores y que se ajusta perfectamente al estilo de vida que comentábamos anteriormente, es el diseño minimalista.
Pero, ¿Qué es el minimalismo de interiores?
A pesar de que muchos inexpertos en diseño de interiores piensan que el estilo minimalista es sinónimo de simpleza y poco carácter, esta tendencia se ha convertido en un reclamo a la hora de redecorar los hogares, y en uno de los estilos más demandados en la arquitectura de interiores de obra nueva. Y es que, el minimalismo bien aplicado puede convertir los hogares en vanguardistas, funcionales y con personalidad.
El diseño minimalista en la arquitectura de interiores surgió en los años XX, y hoy en día sigue considerado como uno de los estilos más innovadores que existen. Esta tendencia de decoración del hogar se considera como pionera del diseño y con visión de futuro. El estilo minimalista divide los ambientes dependiendo de las necesidades, por lo que, la funcionalidad es una de sus principales características.
Características del minimalismo de interiores
El diseño minimalista de interiores se caracteriza por espacios con poca ornamentación, colores neutros, formas simétricas y entrada de mucha luz. Este estilo de decoración intenta crear un ambiente de desconexión con el exterior, transmite calidez, pero al mismo tiempo sencillez y personalidad.
A continuación, profundizaremos en algunas de las características más destacadas:
- Poca ornamentación: se caracteriza por ser simple y por no decorar los espacios con ornamentaciones innecesarias o extravagantes. Esta opción, es perfecta para que el ambiente parezca más limpio y ordenado.
- Colores neutros: una de las características básicas de este tipo de decoración es la utilización de colores neutros. El diseño minimalista se centra en usar de manera estratégica y cuidadosa los tonos neutros, jugando eso sí, con las diferentes intensidades. Cabe destacar que el minimalismo no solo usa el beige o el blanco como muchos piensan, si no que, también apuesta por otros colores, aunque estas tonalidades más intensas suelen tener presencia en los detalles.
- Formas simétricas: la base del diseño minimalista se centra en la simetría, por lo que, las formas puras y precisas predominan para ofrecer la sensación de amplitud y orden que tanto caracteriza a este estilo de decoración.
- Entrada de mucha luz: la presencia de gran cantidad de luz natural es un factor clave, ya que proporciona una sensación de calidez y amplitud. La luz artificial también tiene un papel fundamental, ya sea de manera indirecta o directa para destacar algún rincón o brindar un ambiente de relajación y paz.
En conclusión, el minimalismo en la decoración de interiores ha llegado para quedarse y por mucho tiempo. Su estilo simple, vanguardista y con carácter hacen de este tipo de interiorismo uno de los favoritos del público. Si estás pensando en aplicar este modelo de decoración en tu hogar y necesitas ayuda para adaptarlo de manera correcta, puedes contactar con nosotros ¡estaremos encantados de ayudarte en todo lo posible!